Alfajores "La Yaya" desde San Bernardo

Bueno, como habíamos prometido en el artículo anterior y tras la votación vamos a hablar del Danette sabor alfajor. Aclaro de movida que estos pequeños postrecitos cuentan con todo mi amor a la hora de elegir algo dulce en la góndola de lacteos, y sueño con que llegue el día en que vea un Danette de medio kilo (sé que en Francia o España existieron tras un poco de búsqueda en la red).

El Danette sabor alfajor es igual a éste pero abajo dice "alfajor". Son muy inteligentes

El que nos ocupa a nosotros tiene un color marrón oscuro sumamente agradable a la vista y ni bien sacamos la tapa el aroma a chocolate invade nuestros sentidos y nos prepara para sumergirnos en un éxtasis de placer. Y la verdad es que el postre no decepciona: el sabor a chocolate amargo sumado al toque de esencia de vainilla y limón que nos hace sentir que estamos comiendo un alfajor similar al Havanna o al famoso Cachafaz. Hay que felicitar a la gente de Danone, ya que el producto es muy bueno, aunque como ya dijimos su escaso tamaño hace que tengamos que agenciarnos con por lo menos media docena de los mismos para sentir que realmente lo probamos. Con todo esto puedo decir que:

Lo bueno: es muy parecido al sabor de un alfajor.

Lo malo: potes muy chicos. Las publicidades con el insoportable gordo bigotudo que se hace el francés.

Calificación: 4 Danettes sobre 5.

¿que será una Yaya? me suena a algo sexual.....

Tras esta pequeña disgresión no tan disgresionada, hoy les traigo una review de los primeros alfajores que recibí de regalo en este verano, mientras espero los que seguramente alguno de ustedes, queridos alfajómanos, me traerá tras sus vacaciones. Estos alfajores fueron provistos por mi hermano, en su reciente visita a la costa, en las topísimas playas de San Bernardo. Se llaman "La Yaya", nombre bastante choto pero que por lo menos se sale del común de los típicos nombres de alfajores de costa argentina, tales como "mucho oleaje", "sueños de la concha de mar" y "están caros los alquileres" entre otros. La caja como pueden apreciar en la foto también se aleja del típico paisaje de costa argentina donde se suelen ver las hermosas arenas de color marrón y aguas heladas junto a las aún más hermosas carpas a precios de mansión llenas de señores de plata gordos y jugando al truco. No hay ni una sola referencia en la caja a la costa más alla de decir "San Bernardo" así que por ese lado ya tienen mi atención. Insisto en que en la repartición de playas a nivel mundial deberíamos pedir un recurso de amparo. No puede ser que nos hayan tocado playas donde hace frío. Busquen una foto de alguna otra playa del mundo en el que la gente esté con buzo o campera en la playa en pleno verano, y si la encuentran me la mandan.

Vamos a analizar estos redondeles de sabor que vienen en dos versiones: blancos y negros. Como también pueden apreciar en la foto tienen un envoltorio transparente así que no puedo llenar lineas.....digo escribir sobre ellos. Su diámetro es más bien pequeño, más chico que un alfajor comercial pero a la vez un poco más alto lo cual es de agradecer. Ambas versiones sólo se diferencian en el baño de repostería que las recubre, el cual es de una muy buena calidad a pesar de no ser de chocolate real, por lo menos no es grasoso y conforma una capa bastante gruesa. El negro tiene un gusto ligeramente amargo y agradable al paladar, mientras que el blanco tiene unos toques de esencia de vainilla que lo hacen sumamente digno. Para completar la visual ambos tienen lineas de baño del color opuesto en su parte superior, lo cual puede parecer trivial pero los hace aún más deseables.

Las galletas son compactas y altas, no se desmigajan demasiado y tienen un color marrón oscuro con gusto a cacao amargo. El relleno es una capa de leche de tamaño similar al de las galletitas, consistente y de una cremosidad excelente, con la dosis justa de dulzura para no empalagar y no tapar el sabor del resto de los ingredientes. El gusto queda en el paladar por un buen rato, si bien son ligeramente difíciles de digerir sólos por lo que es bueno tener a mano una chocolatada o un buen café con leche si no hace mucho calor (cosa que dudo si viven en Capital Federal).

Con todo esto no queda mucho más que decir que:

Lo mejor: el dulce de leche

Lo peor: son muy chicos

Calificación: 4 alfajores sobre 5.